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La Cámara Peruana de la Construcción -CAPECO entregó ayer en una ceremonia especial, organizada conjuntamente con INTERBANK, las primeras Certificaciones de Calidad a las seis empresas inmobiliarias del país que lograron obtener el sello Best Place to Live en base a la satisfacción de sus propios clientes, señaló Jorge Monsalve, director de la certificación en Perú.
A mediados del año pasado, CAPECO formalizó una sociedad con la empresa chilena Trend Group América (TGA) con el fin de poder administrar la certificación Best Place to Live, que busca eliminar la informalidad en el sector inmobiliario, así como contribuir a generar una cultura de servicio centrada en el cliente con información relevante para el mercado inmobiliario peruano.
Según se detalló, la Certificación es otorgada solamente a aquellas inmobiliarias que evalúan anualmente la satisfacción y percepción de sus clientes en sus proyectos recientemente entregados y que superan el porcentaje de satisfacción neta global exigido por Best Place to Live. El director de la certificación precisó que desde esa perspectiva, la iniciativa busca generar valor no sólo para las empresas, sino también para futuros compradores de viviendas en el Perú.
Este evento permite congregar a todas las constructoras del país y reafirmar el compromiso que tienen instituciones como INTERBANK y CAPECO con el sector inmobiliario para promover a que participen y trabajen hacia una gestión de calidad, además de conocer las buenas prácticas de sus pares en otros mercados de la región.
“La certificación se obtiene a través de una evaluación que se realiza a los clientes compradores en un período de 6 a 12 meses, desde la entrega del proyecto o etapa. Cada evaluación abarca toda la cadena de valor de la inmobiliaria con el cliente, es decir, todos los productos y servicios entregados, que a su vez se divide en diferentes categorías: gestión comercial, proceso de entrega, servicio al cliente o post venta, la vivienda (casa o departamento), el proyecto (condominio o edificio) y sus áreas comunes”, detalló Monsalve.
“Nos gustaría que en los próximos años los potenciales compradores conozcan de antemano a las inmobiliarias comprometidas con la calidad de sus productos y servicios, sobre todo considerando que se prevén aumentos en la cantidad de compra de viviendas en los próximos años. Lo que se busca con la Certificación Best Place to Live es adelantarnos a las normas y ayudar a las empresas inmobiliarias a construir una cultura de trabajo centrada en el cliente”, precisó Monsalve.
EXPERIENCIA CHILENA
“En Chile desde el año 2013 hasta la fecha, más de 15,000 compradores han evaluado a las inmobiliarias en las que ellos han adquirido una vivienda, los que provienen de proyectos entregados de 50 marcas inmobiliarias, estando 20 de ellas certificadas. Creemos que cualquier inmobiliaria, sin importar su tamaño, cultura o antigüedad puede tener clientes satisfechos con sus proyectos y por ende su marca ser certificada”, destacó el director de Best Place to Live Perú.
