En la ciudad de Changsha, en China, una constructura ha levantado un edificio de 57 pisos en solo 19 días. Esta hazaña responde al método que utilizaron para ensamblar el rascacielo: gran parte de la tabiquería la hicieron con fibrocemento, un material que forma parte del sistema ‘drywall’ o construcción en seco. En el Perú también hay ejemplos de uso de este material. “El hotel Westin tiene treinta pisos y casi no hay muros de ladrillo. Todo es drywall”, comenta el arquitecto Jaime Coronel, Jefe de Innovación en Eternit.
El fibrocemento está compuesto de sílice, celulosa y, por supuesto, cemento. Se vende por planchas y reemplaza, en la mayoría de ocasiones, al clásico muro de ladrillo y concreto que se utiliza en la albañilería. En comparación con un muro de cemento puro, uno de fibrocemento pesa diez veces menos. Pero, ¿qué tan seguro es construir con este material? ¿Puede ser parte de un sistema sismorresistente? ¿Cómo responde frente a la humedad? ¿En qué zonas del Perú se puede construir con fibrocemento? ¿Cuál es su durabilidad y cuántos pisos se pueden levantar? En el siguiente reportaje responderemos estas inquietudes y conoceremos a fondo cómo construir con fibrocemento.
Como mencionan los especialistas en los audios, las planchas de fibrocemento están preparadas para resistir a la humedad. Por lo tanto, pueden afrontar el clima tropical y lluvioso de la selva, así como el salitre generado en la costa. Por su condición térmica, también se utilizan en la sierra.
Este material puede ser parte de un sistema sismorresistente. “Es muy flexible, por eso es muy resistente a los sismos. Se mueve y luego vuelve a su posición. Nunca se desploma. Hemos hecho análisis en el CISMID –Centro Peruano Japonés de Investigaciones Sísmicas y Mitigación de Desastres–, y soporta el tipo de sismo que ha habido en el Perú”, señala el arquitecto Jaime Coronel.
El ingeniero Felipe García Bedoya, ex presidente del Instituto de la Cámara Peruana de Construcción, asegura que, además de ser antisísmico, este sistema permite que se realicen cambios dentro de una casa u oficina sin necesidad de tumbar muros. “Antes tenías que romper paredes para remodelar, ahora puedes mover los tabiques de ‘drywall’ sin mayor problema”, explica. Así, el ahorro de tiempo y dinero en la construcción y reparación se suman como factores de peso para la elección de este material.
Aquellas características han hecho que el crecimiento en ventas de las planchas de fibrocemento “se eleven en casi 20 % en 2018”, según Coronel.
Si bien los materiales señalados en la pieza interactiva son parte del sistema ‘drywall’, el fibrocemento –por su durabilidad– es el más empleado. Según los expertos consultados en esta nota, una vivienda construida con fibrocemento puede durar más de cincuenta años sin presentar daños menores (y si se genera algún desperfecto, simplemente se reemplaza la placa).
“Frente a la cruz de Pueblo Libre, en La Mar, hay un edificio cuyo exterior se vistió enteramente con fibrocemento. Se tarrajeó y está ahí hace 40 o 50 años, en perfecto estado. Tiene durabilidad. No tiene cómo consumirse”, dice el arquitecto César Ruiz, docente de Sencico. Ruiz señala también que este material se enmarca dentro del “Sistema constructivo no convencional”, de acuerdo al Reglamento Nacional de Edificaciones. Sin embargo, su instalación, como la de toda edificación, requiere de la asesoría de ingenieros y arquitectos expertos. No lo olvidemos: construir bien significa confiar en los profesinales para levantar una casa segura y confortable.