Hoy en día, los jóvenes peruanos y docentes de institutos tecnológicos están creando proyectos tecnológicos que combinan creatividad, sostenibilidad e innovación. Estos están mejorando la calidad de vida en comunidades rurales, aportando soluciones en los campos de la educación y la salud.
“Más del 62% de los estudiantes de carreras tecnológicas en Perú ha participado en al menos un proyecto de innovación con impacto social, y el 48% de ellos enfoca sus propuestas en los sectores educación y salud”, indicó Patricia Paulet, subdirectora de las facultades de Ingeniería y Tecnología de IDAT.
MIA: el robot que enseña con inteligencia artificial
En Tarma, Junín, un pequeño robot de madera llamado MIA ha cambiado la forma en que los niños aprenden. Este asistente educativo, impulsado por inteligencia artificial, ayuda a enseñar matemáticas, narrar microcuentos e incluso apoya a estudiantes con autismo. Su diseño es resistente, funciona con energía solar y no requiere conexión a internet.
Con un costo aproximado de S/ 250, el robot está siendo implementado en aulas rurales de la UGEL Tarma, donde ha despertado el entusiasmo de docentes y alumnos.
Prótesis biónicas accesibles
En el Instituto de Excelencia (IDEX) de Pasco a más de 4.000 metros de altura, el docente Miguel Ángel Borja Parra y su equipo crearon Maki Robotics, un proyecto que fabrica prótesis biónicas con impresión 3D a bajo costo. A diferencia de los modelos comerciales que pueden costar entre US$ 5.000 y 15.000, estas prótesis se producen por US$ 300 a 600, ofreciendo una alternativa accesible y funcional a personas con discapacidad.
El proceso de fabricación dura entre 15 y 30 días e involucra evaluación biomédica y personalización de cada pieza. Uno de los beneficiarios, el pequeño Benjamín, recuperó la movilidad y la confianza tras recibir su prótesis. Su historia evidencia la eficacia de la tecnología cuando se pone al servicio de la inclusión social.
Iñatech: tecnología sostenible desde la selva
En Chachapoyas, Amazonas, estudiantes del IDEX Perú-Japón desarrollan Iñatech, una iniciativa que fusiona tradición y tecnología. Se trata de bastones, muletas y andadores hechos con bambú amazónico y fibras naturales, equipados con cargadores solares, linternas y sistemas de alerta que notifican a un contacto de emergencia en caso de caída o accidente.
“El 70% de los proyectos tecnológicos desarrollados por estudiantes de institutos públicos logra resolver una necesidad real en su comunidad, demostrando que la innovación no depende del tamaño de la inversión, sino del compromiso con el entorno”, agrega Paulet.
Los dispositivos, además, almacenan el historial médico del usuario en un software conectado con centros de salud locales. Este enfoque combina diseño ecológico con impacto social, impulsando la autosuficiencia tecnológica en la Amazonía.
