En Lima, la demanda por alquileres de corta duración ha crecido en los últimos años. Este comportamiento responde a un nuevo perfil de inquilino: turistas, profesionales en traslado, estudiantes internacionales y nómadas digitales que priorizan independencia, buena ubicación y espacios cómodos por períodos breves.
Distritos como Miraflores, San Miguel y Jesús María concentran la mayor demanda de alquiler temporal en Lima. Esta tendencia ha despertado el interés de nuevos inversionistas que buscan generar ingresos desde el primer día con espacios funcionales y fáciles de gestionar.
¿Por qué invertir en departamentos pequeños?
En plataformas como Airbnb o Booking, los departamentos pequeños se han convertido en la opción más buscada. Su tamaño permite ofrecer una experiencia funcional, accesible y privada para quienes se hospedan por días o semanas. Para los inversionistas, además, implican menor mantenimiento y mayor facilidad de ocupación.
“La rentabilidad en este tipo de inmuebles no depende sólo del precio por metro cuadrado, sino de cómo se usan y qué experiencia ofrecen. Un diseño bien resuelto hace que cada metro trabaje a favor del retorno”, explica Diana Puga, Gerenta de Negocios Inmobiliarios de Albamar Grupo Inmobiliario.
¿Qué considerar para alquilar un departamento?
- Ubicación altamente conectada. – Elige zonas con acceso directo a transporte, comercios, centros de estudio y espacios de recreación. Estos factores no solo atraen a más inquilinos, sino que permiten alquilar el departamento más rápido y a buen precio.
- Diseño funcional y eficiente. – “Cuando se trata de alquileres de corta duración, un espacio bien distribuido mejora la comodidad del huésped y facilita el uso diario. Esa eficiencia es clave para lograr mejores evaluaciones y mayor rotación”, acota Puga.
- Acabados duraderos y de fácil mantenimiento. La calidad de los materiales es clave en espacios de alta rotación. Pisos resistentes, superficies lavables, buena iluminación y ventilación natural contribuyen a una experiencia positiva y a reducir los costos de mantenimiento.
- Amenities que potencien la experiencia. – “En Albamar incorporamos espacios como rooftops, coworkings o gimnasios, ya que elevan la experiencia y hacen que el edificio destaque frente a otras opciones”, señala la especialista.
Invertir en un departamento requiere elegir inmobiliarias con experiencia, proyectos formales y espacios diseñados para el uso real del inquilino. Esta decisión reduce riesgos y asegura un activo listo para generar ingresos desde el primer día.
“En Albamar analizamos el comportamiento del comprador desde el inicio del diseño. Eso nos permite ofrecer departamentos pensados tanto para vivir como para invertir, y adaptados a las nuevas formas de habitar y alquilar”, finaliza la especialista.
Conoce más de Albamar Grupo Inmobiliario y de sus proyectos, ingresando a www.albamar.com.pe
