noviembre 13, 2025
Economía

El gasto en consultas médicas sube 56% desde la pandemia y golpea la economía familiar

 

 Las demoras en conseguir citas, la falta de medicinas y las limitaciones del primer nivel de atención hacen que muchas familias busquen alternativas fuera del sistema público.

 

Acceder a una consulta médica se ha convertido en un gasto cada vez más alto para el bolsillo de los peruanos. De acuerdo con la última Encuesta Nacional de Hogares (Enaho), los hogares destinan S/583 al año solo en consultas, lo que significa un incremento de 56% frente a los niveles previos a la pandemia.

El aumento del gasto en salud está relacionado con las limitaciones del sistema público, donde las personas acceden en promedio a solo una cita médica al año en Essalud y enfrentan largas esperas que en regiones como Lima, Arequipa, Piura y Cusco pueden superar los tres meses para una atención básica. En tanto, en zonas alejadas como en algunas provincias de Loreto los pacientes incluso deben recorrer ríos o caminos durante días para llegar a un centro de salud, lo que retrasa el diagnóstico y los obliga a buscar otras alternativas.

“La consecuencia es clara: cuando la atención pública no llega, los hogares se ven forzados a pagar consultas privadas o medicinas por su cuenta. El verdadero problema es que estos gastos adicionales recaen sobre familias que ya tienen ingresos limitados. Cada sol destinado a salud termina restándose de la educación, la alimentación o el ahorro, lo que aumenta la vulnerabilidad ante cualquier crisis”, explicó Franco Saito, economista de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES).

Los problemas de infraestructura y el desabastecimiento de medicinas profundizan la crisis. Según el Ministerio de Salud, el 96% de los establecimientos de primer nivel opera en condiciones inadecuadas y en regiones como Piura, Loreto y Tumbes más del 35% de los centros de salud no tiene los medicamentos necesarios para atender a la población.

A la afectación en la salud y en la vida se suma un impacto en la productividad nacional: la falta de atención oportuna genera más ausencias laborales y menor rendimiento. Cada día perdido por enfermedad significa menos ingresos para los hogares y también menos dinamismo para la economía local, que depende de trabajadores sanos y activos para sostener su crecimiento.

Saito señaló que una salida al problema pasa por lograr que los centros de primer nivel atiendan la mayor parte de las consultas, tal como ocurre en otros países donde resuelven hasta el 80% de los casos y evitan la saturación de hospitales. Agregó que también es urgente implementar sistemas digitales para monitorear en tiempo real la historia clínica, la disponibilidad de citas y medicamentos, además de reforzar la prevención con campañas de vacunación, chequeos rutinarios y promoción de hábitos saludables, medidas que resultan más eficientes y menos costosas que atender enfermedades avanzadas.

“Invertir en salud no es un gasto, es una condición para que las familias tengan más bienestar, para que los trabajadores sean más productivos y para que la economía crezca de manera sostenida. Garantizar atención médica oportuna y de calidad significa menos presión económica, menos ausencias laborales y más confianza en las instituciones”, subrayó Saito.

Related posts

Ecuador concede libertad de tránsito a los sectores productivos durante estado de excepción

Revista Construir

MEF: Habrá presupuesto para cartera de proyectos priorizados

Revista Construir

La economía peruana creció 13.3 % en el 2021

Revista Construir

Leave a Comment