IPAE Acción Empresarial anuncia a las empresas ganadoras del #PremioIPAE 2022, en las categorías: Promoción de la Educación de Excelencia y Promoción de la Cultura. Este reconocimiento, que nació desde 1999, se entrega a aquellas empresas que, sin importar su rubro o actividad económica, se comprometen con el país y contribuyen al desarrollo de una educación de calidad y al progreso y difusión de la cultura peruana.
En la categoría Promoción de la Cultura, se ha reconocido la labor realizada por UNACEM a través del Programa Arqueológico Escuela de Campo “Valle de Pachacamac”. La labor de la fabricante de cemento ha estado enfocada en la puesta en valor de sitios arqueológicos, así como en la formación de 1,000 arqueólogos y en la realización de 40 investigaciones. En la categoría Promoción de la Educación de Excelencia, se ha galardonado el trabajo de la minera Antapaccay, que mediante la iniciativa “Ecosistema educativo para el desarrollo territorial de Espinar” ha mejorado la calidad educativa en la provincia cusqueña, aportando a su vez en la reducción de brechas sociales.
Con respecto al modelo del programa de UNACEM, este se ha mantenido a lo largo de 32 años, logrando impactar en: 1) La formación de arqueólogos de campo, con asesoría en campo y gabinete (laboratorios), gracias al Ministerio de Cultura; 2) el aporte en la investigación de descubrimientos arqueológicos; 3) la protección del patrimonio cultural preservando la zona arqueológica; 4) la conservación del ecosistema a través del Área de Conservación Privada Lomas de Quebrada Río Seco; y 5) la difusión cultural a través de la exposición de los sitios arqueológicos para el público en general.
Como parte del programa arqueológico, se han llevado a cabo múltiples investigaciones en los sitios arqueológicos de Tablada de Lurín (Villa María del Triunfo), Pueblo Viejo – Pucará (Lurín) y el santuario de Pachacamac (Lurín). Como resultado, se han descubierto cementerios prehispánicos, asentamientos incas, así como metalurgia y alfarería característica de los pobladores de Lurín y Rímac de hace dos mil años.
El proyecto ha sido viable gracias a la contribución de diversas entidades, tales como: la Universidad Católica del Perú (PUCP); el Ministerio de Cultura; el voluntariado desde diversas universidades del país (Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Universidad Nacional Federico Villareal, Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco, Universidad Nacional de Trujillo, Universidad San Cristóbal de Huamanga) y del extranjero; además del aporte en infraestructura, las instalaciones, el equipo humano y el soporte constante brindado por UNACEM.
Por otro lado, la propuesta de la minera Antapaccay se originó hace 20 años como una iniciativa que buscaba articular esfuerzos bajo un propósito: contribuir al sistema educativo de calidad de Espinar. Se trata de un proyecto que, gracias a las alianzas y la participación de diversos actores, ha enfrentado las brechas sociales en el territorio, buscando mejorar las capacidades de sus habitantes y atender la demanda laboral.
Entre las estrategias impulsadas para el proyecto se encuentran: 1) la alfabetización de adultos mayores a través de la capacitación en artesanía; 2) actividades complementarias para fortalecer la educación inicial, primaria y secundaria a través del Centro de recursos educativos de Espinar “CREE”; 3) CETPRO Ñaupay, que ofrece capacitaciones técnicas productivas; 4) capacitaciones para la empleabilidad en TECSUP, Senati; 5) un programa de becas al buen desempeño escolar; y 6) prácticas profesionales para comunidades.
Es importante destacar que este proyecto ha logrado alfabetizar a más de 1300 personas, destinando más de S/60 millones en infraestructura educativa, construcción y equipamiento de instituciones educativas, y la realización de 40 cursos de formación laboral que han beneficiado a 180 personas durante el último año.
Los galardonados recibieron como reconocimiento a su labor las esculturas premiadas en el XXIV Concurso Anual de Escultura, organizado por IPAE Acción Empresarial y el Centro Cultural de la Asociación Cultural Peruano Británica. La obra titulada “PreSEnte”, creada por la artista Sofía Ramírez Tejeda utilizando una técnica mixta, fue entregada a UNACEM. Por su parte, la escultura de Edwin Huamán, “Espíritu de la tierra”, fue otorgada a la minera Antapaccay.
El Premio IPAE es un reconocimiento que se otorga anualmente a empresas que han contribuido de manera excepcional al desarrollo de la educación de calidad, así como al cuidado y la difusión del patrimonio cultural peruano, generando mayor inclusión y contribuyendo al progreso del país.