Patricia Benavente, renunció a la presidencia de Ositran, tras emitir el viernes un voto discordante en la evaluación del proyecto de adenda para el Aeropuerto Internacional de Chinchero (Cusco). También renunciaron el gerente general, Obed Chuquihuayta, y el gerente legal del organismo regulador.
Como se recuerda, el regulador emitió una opinión favorable respecto al proyecto de la modificación del contrato (con votos de los directores Antonio Balbuena y Alfredo Dammert, este último nombrado durante este Gobierno), pero teniendo a la presidenta en contra.
Además, Benavente deja su puesto enfrentada a otra controversia. Mientras un sector del Gobierno decía que su mandato culminaba en febrero de este año, otros opinaban que terminaba aún en setiembre del 2017.
Fuente: GESTIÓN